La lógica proposicional o lógica
de orden cero trata con sistemas lógicos que carecen de cuantificadores,
o variables interpretables como entidades. En lógica proposicional si bien no
hay signos para variables de tipo entidad, sí existen signos para variables
proposicionales (es decir, que pueden ser interpretadas como proposiciones con
un valor de verdad de definido), de ahí el nombre proposicional. La lógica
proposicional incluye además de variables interpretables como proposiciones simples
signos para conectivas lógicas, por lo que dentro de este tipo de lógica puede
analizarse la inferencia lógica de proposiciones a partir de proposiciones, pero sin tener en cuenta
la estructura interna de las proposiciones más simples.
Una lógica proposicional es un sistema formas cuyos
elementos más simples representan proposiciones, y cuyas constantes lógicas, llamadas conectivas, representan operaciones sobre proposiciones, capaces de formar otras
proposiciones de mayor complejidad.
Considérese el siguiente
argumento:
Mañana
es miércoles o mañana es jueves.
Mañana
no es jueves.
Por
lo tanto, mañana es miércoles.
Es un argumento válido.
Quiere decir que es imposible que las premisas sean verdaderas y la conclusión
falsa. Esto no quiere decir que la conclusión sea verdadera. Si las premisas
son falsas, entonces la conclusión también podría serlo. Pero si las premisas
son verdaderas, entonces la conclusión también lo es. La validez de este
argumento no se debe al significado de las expresiones «mañana es miércoles» y
«mañana es jueves», porque éstas podrían cambiarse por otras y el argumento
permanecer válido. Por ejemplo:
Está
soleado o está nublado.
No
está nublado.
Por
lo tanto, está soleado.
En cambio, la validez de
estos dos argumentos depende del significado de las expresiones «o» y «no». Si
alguna de estas expresiones se cambiara por otra, entonces podría ser que los
argumentos dejaran de ser válidos. Por ejemplo:
Ni
está soleado ni está nublado.
No
está nublado.
Por
lo tanto, está soleado.
Las expresiones de las que
depende la validez de los argumentos se llaman constantes lógicas. La lógica
proposicional estudia el comportamiento de algunas de estas expresiones,
llamadas conectivas lógicas. En cuanto a las expresiones como "está
nublado" o "mañana es jueves", lo único que importa de ellas es
que tengan un valor de verdad. Es por esto que se las reemplaza por simples
letras, cuya intención es simbolizar una expresión con valor de verdad
cualquiera. A estas letras se las llama variables proposicionales, y en general
se toman del alfabeto latino, empezando por la letra p, luego q, r, s, etc.
Así, los dos primeros argumentos de esta sección podrían reescribirse así:
p
o q
No
q
Por
lo tanto, p
Y el tercer argumento, a
pesar de no ser válido, puede reescribirse así:
Ni
p ni q
No
q
Por
lo tanto, p
En la lógica proposicional,
las conectivas lógicas son tratados como funciones de verdad. Es decir, como
funciones que toman conjuntos de valores de verdad y devuelven valores de
verdad. Por ejemplo, la conectiva lógica no es una función que si toma el valor
de verdad V, devuelve F, y si toma el valor de verdad F, devuelve V. Por lo
tanto, si se aplica la función no a una letra que represente una proposición
falsa, el resultado será algo verdadero. Si es falso que «está lloviendo»,
entonces será verdadero que «no está lloviendo».
El significado de las
conectivas lógicas no es nada más que su comportamiento como funciones de
verdad. Cada conectiva lógica se distingue de las otras por los valores de
verdad que devuelve frente a las distintas combinaciones de valores de verdad
que puede recibir. Esto quiere decir que el significado de cada conectiva
lógica puede ilustrarse mediante una tabla que despliegue los valores de verdad
que la función devuelve frente a todas las combinaciones posibles de valores de
verdad que puede recibir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario